miércoles, 25 de mayo de 2011

Literarias: Era fluyendo

"¿Cómo llegaba uno a sentir confianza en el otro, objeto amoroso, y parecerle de toda la vida?
¿Cómo se volvía aquél ser depositario y confidente de nuestros temores, angustias y alegrías efímeras?
¿Cómo resultaba el primero al que llamamos cuando hay una noticia que dar y compartir?
¿Cómo reconocíamos en sus manos, olor y tono de voz las caricias del mundo o la irritación más enojosa al arder de pasiones?
¿Cómo podíamos con todo y con todos si él/ella estaba a nuestro lado?
¿Cómo sabíamos que nada ni nadie nos haría daño o le haría daño, si sólo podíamos defenderlo y poner coto a su mal atacante?
¿Cómo?
No recuerdo...Quizás porque eso fluía y no se organizaba, no se forzaba, se encontraba.Y en el devenir me fuí quedando una y otra vez sin ganas de tanto arranque.
No lo sé.
Que invierta el otro, que me arranque, me conquiste, me invite, me corteje.
Que le pase y me pase, que me espere.
Que levante, que baje, que altere, que suba, que vomite, que inhale.
Que todavía haya un hombre que se vuelva un compañero y se embarque".

L´Orange.